
Antes de la pandemia se hablaba de la tecnología que permitiría reducir los costos laborales. Ese proyecto no era sostenible, aun sin el coronavirus. Ahora se suman los estragos en la economía que pueden llevar a una reducción importante de puestos.
Antes de la pandemia se hablaba de la tecnología que permitiría reducir los costos laborales. Ese proyecto no era sostenible, aun sin el coronavirus. Ahora se suman los estragos en la economía que pueden llevar a una reducción importante de puestos.
Esta reflexión me venía con ocasión que hemos entrado en el último trimestre del año. Sin duda, un año especial por la pandemia.
Pero el amor es mucho más que un sentimiento positivo hacia otra persona, con la esperanza de ser correspondido de la misma manera. El amor es, sobre todo, la decisión de buscar, y realizar el bien de la persona amada.
Todos sabemos que la prudencia una virtud capital en la que se analizan con calma los pros y los contras de una determinación; los convenientes e inconvenientes; recabar antecedentes de un asunto; pedir opinión a los expertos y especialistas. De esta manera hay menos probabilidades de equivocarse.
Antes de la pandemia se hablaba de la tecnología que permitiría reducir los costos laborales. Ese proyecto no era sostenible, aun sin el coronavirus. Ahora se suman los estragos en la economía que pueden llevar a una reducción importante de puestos.