
Jamás se ha comprobado que la sobrepoblación haya impedido la prosperidad de una nación. Actualmente, los pueblos más superpoblados, son pueblos llenos de vigor y porvenir.
Jamás se ha comprobado que la sobrepoblación haya impedido la prosperidad de una nación. Actualmente, los pueblos más superpoblados, son pueblos llenos de vigor y porvenir.
En general, para crecer en madurez se pueden recomendar dos cosas -resumiendo mucho-: Esforzarse en un trabajo serio, responsable, constante, bien hecho. Una persona trabajadora ejercita muchas virtudes y madura antes.
La veracidad como virtud, nos deja ver que la convivencia con los demás, es decir la capacidad de decir siempre –que sea necesario- la verdad y omitir la mentira como un vicio que destruye la confianza, es imprescindible para vivir en paz.
Dedique cada día un tiempo para pensar y pedir consejo. Esto le llevará a actuar con previsión y podrá construir con rapidez. No es lo mismo hacer las cosas en su clima ordenado, sereno, tranquilo, que intentar alcanzar las metas “apagando fuegos” y en un ambiente borrascoso. Se pueden perder muchas energías y no llegar a terminar la obra.
El hábito del éxito edifica una firme confianza en nuestra eficacia personal. Es un sentido de eficacia que da prudencia, serenidad y ductilidad en el actuar, que implica el sano recuerdo de haber experimentado derrotas y éxitos, que han sido tomados como ocasiones de aprendizaje y han servido para salir adelante.