El líder actúa con la mayor objetividad, y se cuida bien de no forjarse una imagen definitiva de las situaciones, como de un peligro que podría comprometer sus decisiones posteriores.
Debido a ello, me ha parecido conveniente repasar las características de uno de los líderes más influyentes de la Historia Contemporánea. Me refiero al célebre, Primer Ministro Inglés, Winston Churchill (1874-1965), quien tuvo la valentía y firme determinación de enfrentarse a Adolfo Hitler cuando la Gran Bretaña se encontraba sin el apoyo de las fuerzas Aliadas.
El día a día fortalece a mamá y a papá, se dan cuenta de lo importantes que son, sin ellos el bebé no se alimenta, no está limpio, no se desarrolla adecuadamente, pues, aunque al principio no se note, ese bebé va adquiriendo paz y seguridad porque siempre alguien le atiende ante sus balbuceos y llantos incomprensibles.
Actuar con rectitud de intención es parte indispensable de la ética del liderazgo familiar; llevar el liderazgo con rectitud de intención favorece la participación, la colaboración y la responsabilidad familiar, ya que todo lo que se pide, tanto en los motivos como los fines se encuentra el bien personal y familiar.
Durante muchos años, se creyó fervientemente que la persona encontraba el impulso de la motivación en la remuneración económica, el premio, el aplauso; sin embargo, esta forma de estimulación provocó en muchas generaciones, la sensación de ser un objeto de utilidad.