
Ejercer la ciudadanía no es fácil. Al participar se practica la esperanza y sin esta no nos moveríamos porque consideraríamos que no hay nada que hacer.
Ejercer la ciudadanía no es fácil. Al participar se practica la esperanza y sin esta no nos moveríamos porque consideraríamos que no hay nada que hacer.
El mensaje cristiano sobre la muerte y la resurrección se alza como una potente alternativa para no ocultar la muerte y tener una esperanza con fundamento.