
“El alma desordenada lleva en su culpa la pena” (san Agustín). “Es para mí una alegría oír sonar el reloj; veo transcurrida una hora de mi vida y me creo un poco más cerca de Dios” (santa Teresa de Jesús).
“El alma desordenada lleva en su culpa la pena” (san Agustín). “Es para mí una alegría oír sonar el reloj; veo transcurrida una hora de mi vida y me creo un poco más cerca de Dios” (santa Teresa de Jesús).