Anunciación.- La Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE) posiciona a México en el primer lugar en la práctica de bullying, entre las 34 naciones que la integran, así lo dio a conocer en su portal de internet la Unión Nacional de Padres de Familia (UNPF).
Lo anterior, debido a que el 2 de mayo, se conmemoró el Día Mundial de la Lucha contra el Bullying, el acoso escolar caracterizado por humillaciones, insultos, amenazas y golpes.
La UNPF, añadió que no podemos seguir permitiendo que este problema crezca, al contrario, se deben construir políticas que lo disminuyan drásticamente y en el que participe toda la comunidad educativa.
La Secretaría de Gobernación ha informado que 32.2 por ciento de las víctimas tiene entre 12 y 18 años, siendo 74 por ciento afectado por maltrato verbal; 21 por ciento psicológico; 17 por ciento físico; 9 por ciento sexual y 9 por ciento cyberbullying (acoso en internet).
“El problema no es sólo escolar, es el reflejo de lo que los niños están viviendo en sus hogares y sus comunidades. Es momento de trabajar todos juntos para erradicar el bullying. Es necesario construir programas integrales donde se analicen caso por caso a la víctima, pero también al victimario”, agregó la UNPF.
Datos del Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE), mencionan que hasta 36.6 por ciento, –en promedio– de los niños mexicanos han sido agredidos en los planteles: les prohíben la entrada a la escuela, los sacan del salón, no los dejan ir al recreo, han sido encerrados o golpeados como castigo, o han sido discriminados.
“Necesitamos políticas que permitan a los jóvenes más oportunidades educativas y más expectativas académicas, que los niños y jóvenes sepan que sus estudios están encaminados a un mejor futuro, por lo que se requieren también oportunidades laborales para los jóvenes. Necesitamos brindarles espacios culturales, deportivos, artísticos para que canalicen su energía sanamente”, dijo la UNPF.
“Necesitamos que las escuelas trabajen por la formación integral de los alumnos y se comprometan a erradicar la violencia en sus planteles creando una auténtica comunidad educativa, con las puertas abiertas para trabajar todos juntos (directivos, maestros, alumnos, padres de familia e incluso vecinos comprometidos) para mejorar el ambiente escolar. A problemáticas complejas, no se pueden dar soluciones sencillas, si no trabajamos todos juntos el problema del bullying seguirá creciendo”, finalizó la UNPF.