Anunciación.- Las tres casas de empeño fundadas bajo la figura jurídica de Institución de Asistencia Privada (IAP), desde los tiempos más antiguos de la Ley de Instituciones de Asistencia Privada en la República Mexicana, son Nacional Monte de Piedad (1775), Monte Pío Luz Saviñón (1902) y Fundación Monte Pío Rafael Dondé (1905).
Lo bueno de empeñar en ellas es que no sólo amortiguamos nuestros ingresos y egresos para salir avante durante la cuesta de enero, sino que, lo que pagamos de cuota para el refrendo y recuperación de la prenda es un monto muy bajo que además sirve para apoyar organizaciones no lucrativas, especialmente, las que se dedican a la salud y a la educación. Para las IAP no hay utilidades, lo que hay son remanentes y son para ayudar a personas, familias y comunidades en situación de desventaja.
El Nacional Monte de Piedad IAP fue fundado por don Pedro Romero de Terreros, conde de Regla. Ofrece la tasa de interés prendaria más baja del mercado, y es una opción para quienes no tienen acceso a los servicios financieros bancarios. Su matriz se ubica frente al zócalo de la ciudad de México y cuenta con más de 300 sucursales en las principales ciudades de la república, con más de 3 mil 500 empleados y más de 4 millones de clientes cada año.
Llama al Nacional Monte de Piedad, Tel: 0155- 5248 1700
Montepío Luz Saviñón IAP cuenta con más de 200 sucursales a nivel nacional. El usuario tiene tres meses para desempeñar o refrendar el artículo empeñado. Hace dos años, como parte del festejo de su 110 aniversario redujo su tasa de interés hasta el 4 por ciento. Más de 600 mil mexicanos han podido pagar tasas de interés seis por ciento más bajas que las que cobran en casas comerciales.
Fundación Rafael Dondé tiene como objetivo principal, promover la excelencia educativa y el desarrollo integral de niños y jóvenes mexicanos. Ofrece los servicios integrales que corresponden a su vocación como casa de empeño, y con los remanentes hace donativos a instituciones educativas, ofrece becas a los estudiantes e instala centros de acompañamiento académico en todo los rincones del país con tutores, psicólogos y pedagogos. Además ofrece a los usuarios una tarjeta de crédito personalizada que funciona con base en las prendas empeñadas, el historial del cliente, su capacidad de pago y proyecto de vida.