Anunciación.- En su homilía en la misa matutina celebrada en la capilla de la casa de Santa Marta, el Papa Francisco, invitó a trabajar para construir una verdadera cultura del encuentro que venza la cultura de la indiferencia. Asimismo, pidió reflexionar sobre el encuentro de Dios con su pueblo y puso en guardia contra las malas costumbres que nos distraen de escuchar a los demás, incluso en familia.

 

“Hoy la palabra de Dios nos hace reflexionar sobre un encuentro, la diferencia que hay entre un encuentro y un mero cruzarse con otro, sin que haya un verdadero encuentro. Cada uno piensa en sus cosas, ve y no mira, oye y no escucha”.

 

Refirió que el encuentro es otra cosa. “Es lo que el Evangelio nos anuncia hoy: un encuentro. Un encuentro entre un hombre y una mujer, entre un hijo único vivo y un hijo único muerto. Entre una multitud feliz, porque había encontrado a Jesús y lo seguía, y un grupo de gente llorando, que acompañaba a aquella mujer, que salía por un puerta de la ciudad. Encuentro entre aquella puerta de salida y la puerta de entrada. El redil. Un encuentro que nos hace reflexionar sobre cómo encontrarnos entre nosotros”.

 

El Papa Francisco, dijo que estamos acostumbrados a una cultura de la indiferencia y tenemos que trabajar y pedir la gracia de realizar una cultura del encuentro. “De este encuentro fecundo, este encuentro que restituya a cada persona su propia dignidad de hijo de Dios, la dignidad del viviente”.

 

“Estamos acostumbrados a esta indiferencia, cuando vemos las calamidades de este mundo o las cosas pequeñas: ‘qué pena, pobre gente, cuánto sufre’… y seguimos de largo. El encuentro. Si no miro – no basta ver, no, hay que mirar – si no me detengo, si no miro, si no toco, si no hablo, no puedo hacer un encuentro y no puedo ayudar a hacer una cultura del encuentro”.7

Fuente: News Va