Por ese grave planteamiento, necesitamos revisar qué significa para cada uno la Navidad, cuál habría sido mi respuesta, de qué lado me hubiera colocado. Cuáles son mis argumentos. Los hay sentimentales y otros profundos, teológicos. Importa descubrirlos y recuperar los segundos.
Para saber si nuestro ideal es algo que valga la pena –por el esfuerzo y las cosas que dejamos para hacerlo realidad-, es preciso las propias posibilidades con las necesidades de los demás, porque todos requieren recibir ayuda: nadie se puede sostener solo.
Los primeros maestros de la vida, los que nos enseñan a vivir desde nuestra tierna infancia son realmente nuestros padres. Por eso es tan importante contar con ellos dos.
Cuándo les preguntas a esos conocidos cómo fue que los adquirió, su respuesta parece muy sencilla:
-Mi papá me invitaba todos los días a levantarme temprano y nos íbamos a caminar, o a correr o andar un rato en la bicicleta.
A este día se le considera de gran importancia por reconocer el papel de los padres en la crianza y educación de los hijos.